No. Justamente lo que define al calzado de seguridad es la protección que brinda en la zona de los dedos y esto se consigue por lo general con punteras de acero.
No. Para considerarse un elemento de seguridad debe estar certificado como tal según lo expresa la resolución 896/99.
No. A los calzados de seguridad certificados se le realizan una serie de ensayos muy estrictos que aseguran una óptima protección. Además de las pruebas que se realizan al producto, el organismo certificador audita los sistemas productivos del fabricante periódicamente para verificar que todas las partidas se fabriquen con el mismo estándar de calidad.
No. Existen comerciantes y fabricantes que así lo afirman pero en la práctica lo que generalmente ocurre es que confeccionan un único par bajo las especificaciones de la norma, lo hacen ensayar normalmente en algún instituto privado y consiguen un certificado que indica que ese par exclusivamente responde a la norma. Esto no asegura y garantiza que el resto de las partidas y productos que se fabriquen también cumplan con los requisitos establecidos en las normas. De hecho ninguno de los fabricantes informales dispone de sistemas de calidad.
El calzado debe exhibir en lugar visible, grabado o aplicado en forma indeleble el sello correspondiente a la norma junto al del organismo certificador.
Si. Se puede solicitar al fabricante la licencia escrita otorgada por la Dirección de Comercio.
En general en cualquier actividad que implique un riesgo en los pies, pero el uso de CALZADO DE SEGURIDAD CERTIFICADO es obligatorio en toda actividad alcanzada por la ley de riesgos de trabajos.
Ud. no estará cumpliendo con las reglamentaciones legales vigentes exponiéndose a demandas civiles y penales entre otras sanciones.
Si. Lo que provee la aislación eléctrica en un calzado de seguridad es la suela, por lo tanto todo lo que se encuentre sobre ella está aislado. De hecho las normas especifican que los calzados dieléctricos pueden llevar ojalillos metálicos, punteras metálicas, plantillas y cambrillones de acero, sin que esto afecte la condición dieléctrica de la planta. Es importante comprender que solo la planta posee características dieléctricas, no debe considerarse que el cuero o telas de la capellada también la posee.
A 14000 V durante 1 minuto y no debe verificarse una corriente de fuga mayor a 3 mA.
Si. Se recomienda usar calzado con fondo dieléctrico en aquellos trabajos eléctricos en los que exista un riesgo de contacto con partes bajo tensión, siempre que dicho calzado sea un elemento más en la cadena de protección eléctrica, la que comprende además guantes aislantes y herramientas aisladas. Se debe tener presente que por envejecimiento o desgaste se puede perder protección, por lo que se aconseja al usuario verificar la resistencia eléctrica a intervalos frecuentes y regulares, en el lugar de trabajo.
Si. Todas las suelas de los calzados de calzados FUNCIONAL son aptas para trabajos con hidrocarburos. De hecho es uno de los principales requisitos que exige la norma.
Si. Las plantas de los calzados FUNCIONAL confeccionadas en CAUCHO BIDENSIDAD soportan hasta 300°C, de hecho cuentan con una certificación oficial para este riesgo específico, que la norma denomina Resistencia al Calor por Contacto y lo identifica con la sigla HRO
Si. Lo fundamental es que el calzado además de soportar el contacto con la superficie, aísle térmicamente al pie de la persona. Las plantas de los calzados FUNCIONAL confeccionadas en CAUCHO BIDENSIDAD proveen al usuario de una alta aislación térmica. Además de soportar contactos de hasta 300°C, toleran contactos permanentes de hasta 30 minutos a 150°C transfiriendo al interior del calzado solamente una mínima parte de es calor (no mas de 22°C). Este riesgo específico la norma lo denomina Aislamiento de Calor del Piso y lo identifica con la sigla internacional HI (Heat insulatión). Los productos FUNCIONAL con este tipo de plantas cuentan con esta certificación oficial.
Las plantas de los calzados FUNCIONAL confeccionadas en POLIURETANO, soportan alrededor de 70°C.

Los calzados de Maincal se encuentran certificados en conformidad de la norma IRAM 3610 para calzado de seguridad. Ésta es una norma que contiene más de 40 ensayos distintos, incluyendo ensayos de calzado terminado (resistencia al impacto y resistencia a la compresión), y también ensayos a los insumos (resistencia al desgarro de capellada, caña, forros, lengüetas, cuello, etc.)
El hecho de que los mismos estén certificados significa que una entidad externa a Maincal, en este caso IRAM, realiza controles sobre el sistema de gestión de calidad para la producción del producto como también sobre los productos propiamente dicho. Esto último lo realiza mediante extracciones periódicas de los mismos para enviar a un laboratorio externo, acreditado por el OAA (Organismo Argentino de Acreditación).
Así mismo, Maincal realiza ensayos internos y externos a toda su gama de productos, ya que es requisito obligatorio para la obtención del sello de producto tener un plan de calidad que especifique programas de ensayos.
Por estas razones es que no existen “protocolos de ensayos” para los calzados, ya que los ensayos que se realizan son varios y combinan ensayos externos e internos de Maincal y comprenden también los controles de IRAM.
La licencia de uso de sello que otorga IRAM, incluye todo un sistema para asegurar la calidad del producto y que los mismos sean conformes a los requisitos de la norma IRAM 3610.